Por el contrario, el concepto "Evolución" cae en desuso por tener menor impacto emocional, se trate de vender un coche o un plan de negocio. Se trata de la adaptación al medio, nuevas necesidades ya existentes y cambios sucedidos en el entorno de vida o empresarial.
Los consumidores, sean personas o empresas, evolucionan con la aceptación de bienes o métodos ya establecidos en el mercado. Un consumidor nunca Innova por el mero hecho de implantar en su empresa un nuevo sistema informático o instalar un disco NAS en su casa. Lo que lleva a cabo es la Evolución necesaria (o no) en su entorno.
El Innovador es quien establece un novedoso método de trabajo, transforma un bien diferencial a los existentes o modifica hábitos en línea marcadamente distinta a los seguidos hasta el momento.
Por tanto, no hagáis caso cuando se entregue un premio a la Innovación a una institución u organismo con base en los cambios introducidos en su arquitectura tecnológica, cuando la realidad es que se trata de la Evolución basada en tecnologías de mercado... que son las realmente innovadoras. Igualmente ocurre con las estrategias de Modelo de Negocio y/o la Cultura Corporativa. Las organizaciones evolucionan "surfeando" sobre las corrientes existentes o innovan cuando plantean una ruta diferente y acorde a su posición actual y la futura deseada, iniciando el Plan de Innovación Corporativa.
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